Atrae la armonía a tu oficina con cinco principios clave de Feng Shui
Si te cuesta concentrarte en tu lugar de trabajo o crees que has perdido creatividad y motivación, no te preocupes. Es cuestión de ordenar el espacio y diseñar la oficina siguiendo unos principios clave de Feng Shui. La sabiduría oriental te ayudará a que tu lugar de trabajo vuelva a ser armónico y a que fluya la energía positiva. ¡Toma buena nota!
Para empezar, es muy importante que el color de la oficina sea el adecuado. Por mucho que creas que los colores como el rojo o el naranja son muy alegres, en tu día a día no te aportarán ni la calma ni la tranquilidad que necesitas para ser más productivo. Al contrario, este tipo de colores son muy agresivos y tampoco agradan a los clientes. Para conseguir inspiración, calma y creatividad apuesta por la gama de los verdes claro, los grises y los azules. No sólo las paredes pueden ser de colores, también las mamparas de oficina y las divisiones de oficina. Si las tienes, no dudes en darle ese toque de color.
A la hora de colocar las mesas de la oficina, has de intentar que estén de cara a la entrada. La posición perfecta es que quedes de espalda hacia la pared o la ventana y que estés de cara a la puerta de entrada. De esta manera, además de controlar quién entra y quién sale, también evitarás la sensación de vulnerabilidad que genera estar de espaldas a una puerta.
Ten una planta cerca, ya que siempre aportan mucha energía positiva. Elige aquellas que sean fáciles de mantener, como por ejemplo, el bambú, que además, limpia el aire y te ayudará a respirar mucho mejor. Además de plantas, también puedes incorporar elementos de aromaterapia en tu oficina, como por ejemplo, el aceite de limón, que te ayudará a recuperar la inspiración.
El Feng Shui también recomienda que tengas un mantra personal, es decir, una frase inspiradora que te ayude en los momentos de debilidad. Escríbela en un post-it y colócala en tu ordenador o en un punto visible de tu escritorio. Cuando te sientas agobiados y estresado, sólo tienes que acudir a ella y recordar tus metas y objetivos y así recuperarás la calma.
Para acabar, rodéate de elementos positivos, ya que la energía positiva siempre atrae más energía positiva. Puedes tener en tu escritorio aquellos objetivos que sean importantes para ti y que tenga un significado que te ayude a caminar hacia adelante.