Feng Shui es el arte chino de la decoración, que balancea las energías de vida o Chi, en el espacio en el cual nos desenvolvemos, como nuestro hogar, nuestro ambiente de trabajo o cualquier otro lugar.
Feng Shui (que se pronuncia “fung shway en chino) significa “vientos suaves que absorbe aguas calmas”, en cierto sentido “viento” se refiere a la influencia invisible que el entorno ejerce sobre cada uno de nosotros, mientras que “agua” alude a su capacidad para sostener la vida. El Feng Shui es una filosofía que analiza el diálogo que establecemos día a día con el ambiente en el vivimos, ya que éste es el reflejo de nuestra alma según lo explican los filósofos orientales.
La premisa básica de este arte es que, si establecemos una relación armónica y cooperativa con nuestro entorno, aumentamos nuestras posibilidades de tener éxito en la mayoría de las áreas de nuestra vida: salud, relaciones, prosperidad. Es decir, que si armonizamos nuestro Chi con el Chi del entrono logramos una armonía con las fuerzas naturales que nos rodean; de esta forma si la energía positiva que circula en el ambiente lo hace en forma libre, las personas que residen en ese ambiente se benefician de esto, y experimentan un sentimiento de bienestar, que se refleja en su salud y prosperidad.
Es cierto que la persona al decorar su casa le atribuye relaciones y objetos que tienen un significado en su mundo interior. En la antigüedad se reservaba este arte a los templos y palacios chinos, para mantener la energía centrada en estos lugares, hasta que hace poco tiempo, este arte fue divulgado abiertamente al público general para que todos puedan beneficiarse con esta armonización energética, teniendo gran influencia en la decoración occidental.
Esta disciplina es una mezcla de Arquitectura, Diseño Interior, Matemáticas Chinas y sentido común que con el paso del tiempo ha evolucionado hasta convertirse tanto en una ciencia como en un arte. La parte científica proviene de los cálculos y la metodología que se utiliza para analizar una propiedad. Lo artístico del Feng Shui radica en la sabiduría adquirida tras haber realizado una serie de análisis y conocer el grado exacto en el que las soluciones (derivadas del análisis científico) deben ser prescritas.
Un análisis Feng Shui examina el entorno natural, la construcción, cómo interactúa la gente con el inmueble y observa los factores relacionados con el tiempo. Basándose en estas consideraciones, se pueden hacer recomendaciones sobre cómo mejorar el Chi de cierto lugar. Los resultados incluyen prosperidad, beneficios en cuanto a la salud así como bienestar.
Cuando el Feng Shui se aplica a un negocio o a una casa, muchos elementos son analizados y examinados. Esto incluye los vecindarios, calles, ubicación, direcciones, forma de los edificios, techos, puertas, ventanas, habitaciones, escaleras, ubicación de estufas y otros equipos, drenajes, columnas, vigas, luces y muchos otros. Además de fomentar la presencia del Chi positivo, también se utiliza para reconocer, evadir y corregir lugares con una carga de energía negativa. Las personas que viven y trabajan en ambientes sanos se sienten más creativas, a la vez que aumentan su potencial para lograr el éxito social y financiero, así como la armonía personal.
El Feng Shui de un lugar también puede ser orientado con fines específicos al considerar el Chi del propietario y de los ocupantes. Una casa se puede beneficiar con un Chi tranquilo y armonioso pero una tienda requiere de uno más estimulante para promover las ventas. Los lugares industriales pueden orientarse para reforzar la producción y la investigación.
Algunos edificios famosos creados conforme a los principios del Feng Shui son: El Banco de Inglaterra, la empresa British Telecom, la empresa Virgin en Inglaterra, el edificio World Trade Center de Nueva York, el Museo Guggenheim de Nueva York, el Zhong Hedian de la Gugong o ciudad prohibida de Pequín, el Banco de Hong Kong y el Banco de Shangai, El palacio Federal Mexicano, Banco Federal Argentino entre otros. En Venezuela en los ultimos años se ha venido avanzando en el tema y en ciudades como Caracas, Valencia, Maracaibo y Lechería , ya estan siendo diseñados proyectos y ejecutando otros de acuerdo a la construcción respetando las leyes de la naturaleza o Feng Shui.
Sin embargo, en lo referente a la decoración de espacios ya desde los noventa se han venido aplicando las técnicas de este arte milenario que nos proporciona una mejor calidad de vida a nivel energético y si aprovechamos su sabiduría tenemos una mejor calidad de vida empresarial, laboral, urbanística y familiar.
La práctica del Feng Shui toma en cuenta las siguientes especialidades: el Feng Shui tradicional, la interpretación moderna del Feng Shui (Occidentalizada o Tropicalizada), la Geomancia y la Astrología. El arte del Feng Shui es una herramienta a tener en cuenta para todos aquellos que quieran alcanzar la armonía, la felicidad y la paz interior. Además de ser un excelente complemento para arquitectos, sanadores holisticos, diseñadores, ingenieros, terapistas florales, decoradores y paisajistas, quienes pueden incorporarlo sin dificultad a su profesión.
La premisa fundamental del Feng Shui se basa en que todo a nuestro alrededor, hasta los detalles más pequeños en muebles y decoraciones, puede favorecer o perjudicar nuestras metas de vida. Los principios del Feng Shui hay que aplicarlos cotidianamente: ya sea un departamento alquilado, una oficina alquilada, una habitación de hotel o cualquier otro tipo de alojamiento temporal, no deja de necesitar cierto equilibrio aunque sea temporal. MUCHAS PERSONAS ESPERAN A ADQUIRIR EN PROPIEDAD SU HOGAR para aplicar entonces los principios del Feng Shui, ya que consideran una pérdida de tiempo, esfuerzo y dinero hacerlos en viviendas de alquiler en la que no van a vivir más de dos o tres años, esto es como decir que «VOY A ESPERAR DOS AÑOS PARA EMPEZAR A CUIDAR DE MÍ MISMO».
En el Lejano Oriente, el conocimiento y el control de los flujos de energía sirven de fundamento para los sistemas de curación tradicionales como, por ejemplo, la acupuntura y el Shiatsu, así como también para las artes marciales como el Tai Chi, el Qi Kong y el Aikido. A la energía se la nombra de diferentes formas. En China se la denomina Chi, en Japón se la conoce como ki y en la India prana. En occidente no existe ningún vocablo específico, aunque algunas expresiones, como atmósfera, ánima, fuerza vital o espíritu tratan de describirla. El Chi es un concepto básico para la astrología oriental y para el Feng Shui.